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viernes, 25 de febrero de 2011

VENTA DE LECHE EN CANTINA


EL CONSUMO DE LECHE EN COLOMBIA

Los medios de comunicación masivos están desviando la atención de los colombianos hacia otros temas tales como la revolución de los países del norte de África, la corrupción en el das, las chuzadas ilegales, las falsas desmovilizaciones, los falsos positivos etc. etc.



Pero no les interesa denunciar el gran problema social que se avecina el de los productores campesinos de leche. En Colombia donde este producto de primera necesidad es de vital importancia para la nutrición infantil y de la familia poco a poco ira desapareciendo de la mesa de los colombianos, todo debido a los decretos expedidos por el Gobierno Nacional; donde prohíbe la comercialización de leche cruda por parte de los pequeños y medianos productores, favoreciendo con esta nefasta medida, a los grandes monopolios multinacionales. La leche en cantinas que los consumidores compran  a mil pesos el litro en la ciudad, pero el campesino productor lo vende a $ 500 litro no se será de fácil adquisición; porque únicamente se venderá la bolsa pasteurizada a $ 1700 y $2000, esto con el supuesto argumento del Gobierno Nacional que la leche cruda es perjudicial para la salud humana. Si nuestros abuelos, padres, hijos, nietos han consumido esta leche y han disfrutado de buena salud por toda su vida.
En Medellín desde hace varios años esta prohibido vender leche cruda y ahí están los grandes problemas de violencia y desempleo.
En el Dpto. del Atlántico se acaba de expedir otro decreto prohibiendo la comercialización de leche cruda; sin tener en cuenta la situación socio-económica de su gente. Esto nos hace pensar que en los próximos meses cada gobernador, en cada una de sus regiones hará lo mismo apoyándose en lo que ellos llaman las normas nacionales. Los TLC que han firmado o se firmaran  con Canadá, Estados Unidos, la Unión Europea exigen que la venta de leche en las calles de las Ciudades Colombianas ya no se comercialice más por parte de los pequeños y medianos productores, con el objetivo de aumentar sus multimillonarias ganancias de sus transnacionales dedicadas a comercializar este producto y sus derivados.
En Nariño región productora de leche por excelencia, las familias que se dedican a este trabajo, aproximadamente 400 mil, quedaran desempleadas porque no han tenido los recursos necesarios para una reconversión laboral o actividad económica diferente tal como lo propone el gobierno en un plazo de dos años.( medida que se viene aplazando, pero que no esta derogada) Los campesinos productores de leche que de generación en generación han permanecido en este trabajo serán desplazados las ciudades a engrosar los cordones de miseria, hambre, desempleo, pobreza y victimas de muchos otros problemas.
Así los mandatarios regionales continuaran expidiendo  sus decretos supuestamente basándose en normas nacionales ya expedidas para proteger a las multinacionales que comercializan los productos lácteos y perjudicando a los campesinos Colombianos 
Ante tal situación que se avecina los gremios, la clase política dirigente que dice representar los intereses del pueblo, sindicatos, Cámaras de Comercio, FENALCO, fuerzas vivas del País deben aunar esfuerzos para que esta situación que degenera la ya maltratada economía campesina del pequeño y mediano productor no siga en ascenso.
Los Colombianos de escasos recursos económicos que son el 90% quedaran sin leche para el consumo familiar ante la elevada de los precios y de derivados lácteos importados desde Estados Unidos, Canadá y la Unión Europea.

Marcha_Lechera7


"En los últimos meses, uno de los brazos de la arremetida ha alcanzado a los vendedores de leche cruda para hervir, con múltiples excusas han argumentado que no es posible que se siga comercializando el producto de esta manera, para lo cual han expedido decretos que prescriben una serie de requisitos que no resultan justas para los productores colombianos, porque no tiene las condiciones para cumplir estos requerimientos; sumemos a esto que los productos lácteos que entrarían a Colombia con los TLC´s están completamente subsidiados, y volvemos a las consecuencias imprevistas. Todo esto promueve un sesgo que garantiza a las multinacionales la comercialización de sus productos sin ninguna competencia, lo que deja en la ruina a los pequeños, medianos e incluso los grandes productores colombianos.





La falta en la mesa de papa, arroz, pan y leche en muchas familias colombianas está ligada con la política agrícola. Hacer de las importaciones el principal instrumento de abastecimiento de cereales, oleaginosas y alimentos básicos, la eliminación del sistema de precios internos de sustentación estables por la adopción de los precios “de mercado” como referencia principal, la supresión del control eficaz de los costos de los insumos, la imposición de normas sanitarias inconsultas con la realidad productiva nacional y, a contramano, la concentración de apoyos y crédito en las cadenas exportadoras y en los grandes “empresarios” están en la raíz de la carestía que sufrimos. Una inseguridad alimentaria propia de una gestión ministerial que pregona que “es mejor la uchuva que el trigo”, que promueve yerros como su proyecto Carimagua y que, ante la evidencia, recurre a intimidar a quienes lo controvierten o a quienes presentan cifras que no le son convenientes por develar su fracaso. Urge una corrección inmediata.” 

 http://twitter.com/rosaldelmontees

Por: Leticia Rodríguez
        Economista

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